21 de junio de 2008

Pungas

Hace bastante que no viajaba en subterráneo. Ayer tomé la línea B en hora pico de la mañana y fui testigo del accionar de un par de pungas (ladrones) que subieron unas estaciones después que yo. Yo estaba parado de espaldas a la puerta que no se abre, es decir de frente a la puerta por donde entran todos los pasajeros. Ya desde el vamos los dos tipos se veían sospechosos: primera técnica del punga: entrar empujando cuando ni la cantidad de gente ni la situación lo amerita. Quiero decir, si el vagón está lleno pero no llenísimo donde no cabe ni uno más, sólo lleno, y alguien entra empujando innecesariamente, es lo más probable que sea un chorro: aprovechan esa fricción para hurgar en los bolsillos de la gente que empujan.
La verdad es que sentí mucho impotencia de ver cómo uno le metía la mano en el bolsillo del saco a una mujer grande y enseguida le abría el bolso a una chica, como si nada, totalmente volcado a afanarle a quien esté más a mano. Es triste ver a la misma chica a los pocos minutos dándose cuenta de que le abrieron el bolso y que le falta algo.
Otra clave para detectarlos: siempre van por lo menos de a dos. Es decir, si ves a alguien metiéndole la mano en el bolsillo o cartera a otro pasajero, estáte seguro de que hay otro chorro haciéndole de campana o también robando muy cerca del primero. Se miran a los ojos continuamente sin hablarse, se comunican con la mirada como en el juego del truco. Saben cuándo los descubrieron y cuándo se tienen que bajar. De hecho cuando se bajan en una estación no es para bajarse del subte sino para pasarse a otro vagón.

Obviamente dan ganas de escracharlos, de dejarlos en evidencia ante todos, pero ¿cómo hacerlo? Eran dos monigotes de casi dos metros, con cara de brutos y jodidos, de esos a los que no les mueve un pelo si tienen que clavarle una púa a alguno que se quiera hacer el justiciero.
Y si bien me paralizó la idea de una situación violenta en un ámbito cerrado como el del subte en movimiento, pensé "si todos acá adentro reaccionáramos juntos seríamos muchos más que ellos, los reduciríamos fácilmente".

No hice nada más que observar el delito y quedarme con esta sensación atragantada,
¿Qué hace cada uno de ustedes cuando ve que pasa esto? ¿Experiencias, comentarios, sugerencias?

17 comentarios:

Gioconda dijo...

Yo vi una vez a uno en el tren cuando volvía de la facultad y no hice nada porque yo soy muy cagona en ese sentido. Mira si el tipo se la agarraba conmigo o me hacía algo. Yo tenía 20 años.
Pero sí, da una impotencia terrible porque una quiere ayudar pero no puede.
La última vez que vi a un punga fue cuando fui a la cancha de velez cuando boca hizo de local ahí por la libertadores. Yo estaba en la platea y la popular estaba abajo y vi como le pegaban a un tipo que resultó ser punga.
En la cancha es dintinto porque si descubren a un punga lo cagan a palos entre todos y listo. No digo que esté bien pero al menos el tipo recibe su merecido.
Y te digo que varias veces me sentí más segura dentro de la cancha que en la calle.

Besos.

Guagner dijo...

Y encima que en el subte hay nada o muy poca policía, en muchos casos están arreglados. lo se por boca de uno (sargento).
Les dejan el diezmo, por lo general en algún tacho, y todo sigue.
Que hago yo... nunca vi pero seguro que porque soy muy distraído. Tengo todos mis objetos conscientemente asegurados y voy escuchando música.
Si los viera, creo que quizás intentaría, distraídamente interponerme en su labor, haciéndome el salame, hasta que se bajen. Y sino puedo, seguro no haré nada.
Es una mierda la impotencia.

Psicodélica star dijo...

A mí me robaron mi primer celular así. Es horrible la sensación. Aparte me acuerdo muy bien de la cara del tipo, supe que fue él porque son fáciles de reconocer (pero no de detener). Ni bien se bajó del vagón, me di cuenta.

Es todo un tema reaccionar al verlos, no sabés en qué puede terminar. Además, es cierto, depende mucho de los pasajeros de turno del subte y de su colaboración.
Dan muchas ganas de hacer algo.

Lulis*~ dijo...

me han robado y he visto... horrible.

cuando em robaron, fue como contas vos.. entran empujando.. yo iba para la facu (en subte) conun dolor de cabeza descomunal,, muerta de cansancio y ni em di cuenta. despues, cuando mi billetera ya no estaba, fue atando cabos... era un pibito que em pregunto por una estacion (encima me hablo! :S) y llevada colgado en el brazo un saco... mas claro imposible :/
otra vez me robaron plata y el celu en al calle, alas 6am... eran dos. mucho no pude hacer, ademas que em paralice del miedo. dos flacos y yo, nadie mas en la calle. la saque baratita.

y despues, en el subte vi facil 3/4 choreos... en uno alguien grito y se bajaron al toque.. en el resto se escaparon porque arrancaban cadenitas o pulseras justo un instante antes de que se cierren las puertas del vagon, tienen ese timing re conocido :S

la sensacion de impotencia no te la saca nadie, ademas.

beso

Anónimo dijo...

Que sensación de mierda!!

Ver algo y no poder hacer nada. horrible. Es verdad... si no te metés te sentís mal, si te metés por ahí la ligás mal.

Lo mejor sería actuar entre todos, pero como?
Hay que hacer un código internacional de pasajeros...

Guagner dijo...

para ponerle humor... Una vez en el subte D, una mina gritó "me robaron el celular... otra vez".
En el momento fue gracioso por eso del "otra vez".
ahora que lo veo no es nada gracioso... perdón.

Lo del código internacional de pasajeros sería buenísimo. O aunque sea municipal nomás.

Lulis*~ dijo...

y el codigo que diria? que no es ilegal golpear a un punga? :P

Guagner dijo...

no, seria una manera de ponernos de acuerdo para hacer siempre lo mismo cuando vemos a 1.

Anónimo dijo...

No tengo mucha experiencia con robos... posiblemente porque siempre voy en cualquiera en subtes y colectivos. Las 2 veces que me quisieron afanar (en la cara, no de punga) safé. La primera estaba con una amiga en parque chacabuco y nos vino a chorear uno en bici (decía que tenía un arma, pero nunca la vimos). Era tipo mediodía, vio gente que venía atrás nuestro y se fue. La otra fue frente al parque, estaba yendo a trabajar y me quisieron arrancar la cartera 3 pendejos de 15, empecé a gritar como loca y a forcejear, ahí salieron vecinos y me ayudaron. La 2 veces me asusté, pero inmediatamente me dio una sensación de odio e impotencia que me vuelve cada vez que me acuerdo. Y eso que fueron hechos practicamente insignificantes comparado a lo que puede pasar.

Tomás Grounauer dijo...

Vi más de una vez que en una situación así, alguien decía en voz bien alta para que escuchen todos: "Cuiden sus bolsillos que acá hay gente que está metiéndoles la mano para robar".
Creo que es lo mejor. Quizás no se descubra a los pungas, pero por lo menos uno está alertado y no le roben sus cosas, que es lo que más importa.

Marcela dijo...

lo de tomás me gustó.

Una vez me tiraron de una cadena que tenía al cuello en el subte A. Todos quedaron asobrados sin hacer nada y yo temblando.

hace poco me quisieron sacar el celular de la mano y no se como me colgué del cuello del pibe y ni sé que le dije. Él corrio y yo quedé media hora con un nivel de adrenalina extremo, entendí como se sentía ser violento y lo fácil que es querer matar en ese estado: no recomendable. Olvidable.

Hace unos días me pareció ver un pibe sospechoso, así relojeando con otro a un pibe con un Ipod ausente en sus auriculares, le toqué el brazo y le dije que se cuide y me bajé. de última si no era chorro no pasa nada.

Es una jungla.

Saludos,

Mar

Unknown dijo...
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
Anónimo dijo...

Lo del código se me ocurre que puede funcionar así... si estás dispuesto a pegarle a un punga entre varios tenés que llevar un prendedor rojo redondo (por ejemplo), entonces cuando ves que otros tienen ese prendedor (en un lugar visible) y ven a un chorro se hacen una seña y le dan duro.
Si ves que no hay ninguno de tu "equipo" te quedás piola.

La de gritar que hay un punga es buena, pero igual te puede llegar el puntazo por cagarle el negocio.

Guagner dijo...

jajaja
buenisimo, hagamos campaña por el prendedor rojo!

Tomás Grounauer dijo...

bellamy: es muy buena idea, pero ojo con el falso cómplice: si los punga descubren el código del prendedor rojo, uno de ellos se lo pone, y cuando vas a acudir a él te boxea junto a los demás cacos.

Anónimo dijo...

acabo de frustrar un pungeo en la linea 15 y me ligue una trompada jeje
pero bueno... se tuvieron que bajar sin su botin

igual para las mujeres la metodologia es facil... GRITAR COMO LOCAS!

nunca falla

GASTONROCKER dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.